Afirmo: "Considerando en frío, imparcialmente" (Vallejo dixit), la libertad de las lenguas solo está sometida a la voluntad de los hablantes; no de gobiernos ni academias. (Bernardo Rafael Álvarez)
martes, 27 de agosto de 2013
LUCIR
Leído en el diario Gestión: "Las reservas internacionales suman US$ 279,000 billones, con lo que el ratio de cobertura es 1.1 veces, cuando en el periodo 2007-08 era de 3 veces, haciendo que el país luzca más débil que muchos otros emergentes." (martes 27 de agosto 2013, p. 20, cuarta columna; artículo de The Economist" traducido por Antonio Yonz Martínez). Veamos, los significados que se le da al verbo "lucir" (DRAE): brillar, resplandecer; sobresalir, aventajar; iluminar, comunicar luz y claridad...Ninguno tiene connotación negativa, sino todo lo contrario. Lo que puso el traductor sería equivalente, más o menos, a esto: "...haciendo que el país muestre el resplandor de su debilidad". Obviamente, no es eso lo que quiso decirse en el artículo aparecido en el periódico norteamericano, es decir, no corresponde a la traducción correcta. Sin embargo, hay que tener en cuenta una cosa. No se trata solo de un problema de traducción; el uso del verbo "lucir" con el significado opuesto a aquellos que recoge el DRAE, no es aislado: muchos incurren en él. Si este uso, que adolece de incorrección, llegara a generalizarse y, digamos, imponerse, en el futuro terminaría legitimándose, como ha ocurrido con otras voces que originalmente tuvieron un significado opuesto. Por ejemplo: mariscal, que en la Edad Media era el "sirviente de los caballos" (Marh-scalc) y posteriormente se convirtió en un grado o título militar de más elevado nivel, de altísimo honor.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario